Un abertzale visionario
y pragmático
Desde mi posición de Euro diputada contribuir a este homenaje a Don
Manuel de Irujo obliga a hacer parada y fonda en su aportación a la
construcción europea. El político navarro, y por lo tanto vasco, como le
gustaba recalcar fue, para empezar, un abertzale de una pieza, convencido y
coherente. Pero esa posición, la de miembro de un país pequeño, que buscaba,
busca y buscará su papel en el concierto de las naciones, le llevó a
desarrollar una teoría política sobre Europa, su unión y funcionamiento que,
como las de Landaburu o el propio Lehendakari Agirre beben de las mismas
fuentes: una lógica aplastante, profundas convicciones democráticas y un
humanismo pragmático y con identidad nacional. Por eso Hoy, mirando con perspectiva
su aportación política, a su condición de abertzale y pragmático hay que
añadirle otro adjetivo: el de visionario.
![]() |
Sede del Gobierno Vasco en Paris confiscada por el régimen franquista |
Con esas herramientas morales y una sólida
preparación técnica la vida de don Manuel enfrentó todo tipo de vicisitudes.
Conoció a Sabino Arana, siendo un niño en la cárcel de Larrinaga. Fue diputado
foral en Navarra, diputado al congreso por Gipuzkoa y ministro en dos gobiernos
de la república reivindicando, en tiempos de guerra, el humanismo que siempre
guio su obra. El exilio determinó que esas capacidades se volcasen en una idea
entonces revolucionaria: la génesis de una Europa unida en y por la diversidad,
una Europa Federal que se basaba en la suma voluntaria de las naciones
europeas. Una Europa en la que la guerra fuese imposible.
La Unión Europea de Irujo es una suma voluntaria de identidades que se reconocen y respetan, que construyen. Muy diferente a la Unidad indisoluble que se vende con desfiles, bandas militares y la extraña danza de la cabra de la legión. Porque “el estado, como decía Irujo, es una simple formación jurídica y política. La nación es lo que prevalece”. Y nada temen más los estados que esa idea. Porque todos ellos aspiran a ser nación y acaban aplastando otras para crecer, aún a costa de deprimir los derechos de las personas que se sienten parte de la comunidad “desaparecida”.
Izaskun Bilbao
Barandica.
Eurodiputada de EAJ-PNV.
No hay comentarios:
Publicar un comentario